9 de agosto de 2012

Todo el mundo se esconde detrás de un personaje.

Me he dado cuenta de que todo esto es un teatro en el que todo el mundo  se esconde detrás de un personaje, tienen consigo siempre un guion donde alguien mas les obliga a hablar, a expresarse, nadie contradice lo que dicen unas cuantas líneas y siguen la función tal cual el papel lo indique. Otros, en cambio, renuncian y quedan totalmente solos, absortos en su libertad. Algunos pocos traman estrategias  para cambiar aquel libreto y  esperan así jamás ser descubiertos... Si se diera el caso y alguien sospecha, mandan al más débil al frente para cubrir su sucio juego. Luego ríen, rodeados de tanto egoísmo y falsedad. La mayoría, evita los problemas y solamente hacen su trabajo. ¿Sabes qué? Somos actrices y actores que manejan su papel de distintas maneras, el espectador puede disfrutar de su mejor perspectiva, pues para muchos el dolor ajeno es motivo de celebración, otros se limitan a esconderse tras un escrito, deseando que llegue un valiente y  les salve, pero eso, eso es solo otra fantasía...

Has cambiado y lo sientes.

Un día te das cuenta de que ya no te gustan esos ositos en tu habitación, ni esa blusa, ni esos zapatos anchos, has cambiado, lo sientes, ya no quieres dar paseos por la calle sin más, no quieres que pasen los días y los meses sin hacer nada, no quieres quedarte en casa viendo la tele las 24 horas del día, no quieres sentarte en un banco mientras lees esa revista que te ayudará a conseguir al chico de tus sueños, y que con un test te dirá lo que los demás piensan de ti, te das cuenta de que estarías mejor con un poco de rímel, de gloss y con esa falda tan bonita que viste en  aquel escaparate caminando por el centro., Miras a tu alrededor y ese pique que tenías con los chicos ves que ha cambiado, no les ves unos inmaduros y ‘tontos’, les ves como algo que conseguir, te das cuenta de lo que quieres, de que lo prohibido te llama más la atención, de que las normas están hechas para saltárselas, de que te estás haciendo mayor y te das cuenta de que la vida solo se vive una vez y que sabes como quieres vivirla.

Tengo ganas de ti: Carta de Hache a Gin.

Es el momento de escribirte lo que nunca fui capaz de decirte, aunque sea tarde, escribir lo que ha sucedido en una carta que no te voy a mandar. Que no vas a recibir nunca. Que como tu me enseñaste, cuando acabe de escribirla la quemaré, los sentimientos se pondrán a arder, y ese dolor, cómo era... Ah sí, ese dolor no se te queda tan dentro. Esta vez solo quiero ser claro, sería un imbécil si no gritara que me he equivocado, desde el principio, contigo. He intentado avanzar sin apartar antes las cosas que lo impedían, agarrado al pasado, mirando para atrás, queriendo olvidar pero sin parar de recordar, empeñado en quedarme ahí. ¿Qué locura no? En medio de un lado y del otro, sin perdonar, sin perdonarme, sin avanzar.  ¿Dónde está el secreto del futuro? Puede que esté en fijarse bien, en avanzar, mirar más cerca. Más. Tan cerca que lo borroso se vuelve nítido, se vuelve claro. Solo hay que dejar que las cosas pasen. Y ahora lo tendría claro. Aunque ya no depende de mí, si no de ti... Te quiero.

Duermo más tranquila con tus "Buenas Noches"

No podía quedarme dormida. Esperaba tu sms de buenas noches. Sabía que quizá no tendrías por qué enviarme nada, pero lo deseaba. No sé exactamente por qué lo deseaba...Pero parece que duermo más tranquila. Sin embargo, me quedé dormida, pensándote. A las 5 de la mañana, algo me despertó. No sé exactamente el qué, pero ahí estaba: Un mensaje nuevo recibido. Con una sonrisa de oreja a oreja y los ojos aún entrecerrados, leí tus bellas palabras. Poco a poco sabes cómo conquistarme. No dudo en responderte, seguramente no lo leerás hasta la mañana siguiente pero... ¿Qué más da? Vuelvo a dormirme y esta vez, sueño contigo. Es la primera noche que sueño contigo. Y creo que no será la última. Aparezco contigo en una cama, parece que sale el sol por la ventana. Busco tu boca y te beso. Aún duermes...Admiro tu belleza y acaricio tu piel tímidamente. No sé qué has visto en mi y yo tampoco sé que he visto en ti, pero parecía tan real...Podía sentir cómo mi corazón se aceleraba...Hace mucho tiempo que no tenía un sueño tan real. Espero que algún día se haga realidad.

Tu vida cambia.

Cada vez que conoces a alguien tu vida cambia y, tanto si te gusta como si no, nosotros nos hemos encontrado, yo he entrado en tu vida y tú en la mía.