La amistad es una forma de amor, probablemente la más libre y la más desinteresada de todas. Los padres no son elegidos, ni los hermanos, ni la familia, ni los hijos, ni del todo la pareja porque la elección suele estar condicionada por el enamoramiento y la pasión. Sólo elegimos a los amigos.

Sabrás que es él, no cuando se adapte perfectamente a la descripción que dabas de tu hombre perfecto, si no cuando descubras que tu descripción de hombre perfecto se ha modificado para describirlo a él.

Vértigo en su mirada.

Iba subida en tacones de 50 centímetros y el vértigo solo existía al mirarle a los ojos.

Puedes pasarte la vida levantando muros, o puedes vivirla saltándolos. Hay muros que pueden parecer o ser demasiado peligrosos para cruzarlos y lo único que sé es que si finalmente te lanzas a cruzar… las vistas al otro lado son maravillosas y te sentirás como en el cielo, con las manos en el aire.

Jack Sparrow.

"El problema no es el problema. El problema es tu actitud frente al problema." 

Podría ser lo que tú desees.

- Y tú, ¿quién eres?

+ Ahora mismo podría ser lo que tú desees, un superhéroe.

- ¿Tienes super

poderes? ¿Vuelas?

+ Mejor... hago volar.

‘Los tíos prometen hasta que la meten y una vez que la meten, olvidan todo lo que prometen.’

Heartbreaker.

- ¿Sabes  lo mejor de los corazones rotos? – Negué-.

- Que sólo pueden romperse una vez. Lo demás son rasguños.

Nadie puede romper en trocitos tu sonrisa.

Buongiorno, Principessa!

¡Buenos días princesa! He soñado toda la noche contigo, íbamos al cine y tú llevabas aquel vestido rosa que me gusta tanto.

¡Sólo pienso en ti, princesa!

¡Pienso siempre en ti!

Inmortales.

-Con cada vaso de alcohol acabas con cientos de células del cerebro, pero eso no importa mucho, tenemos millones de ellas.

-Primero mueren las de la tristeza, así que estás sonriente. Luego mueren las del silencio y todo lo que piensas lo dices en voz alta, pero eso no importa porque de seguido mueren las de la estupidez.

-Entonces vamos a beber alcohol.

-Por desgracia, no es tan fácil. Aún quedan unas muy importantes, las de los recuerdos y esas son muy difíciles de matar. Creo que nada de este mundo es capaz de acabar con todas ellas... ni el alcohol. 

Son… ¿Cómo diría yo? Ah, sí, inmortales.